Respuesta del Microambiente a la Inflamación
La inflamación crónica se asocia con la mayoría de las enfermedades asociadas al envejecimiento, incluyendo la enfermedad de Alzheimer, la ateroesclerosis, la osteoartritis y el cáncer. La inflamación crónica se puede resolver por completo solo cuando el agente ofensor ha sido totalmente removido del tejido. Por ejemplo, un sistema linfático activado va a potenciar el drenaje linfático, la circulación de antígenos y la migración celular, lo que es esencial para ayudar al cuerpo a eliminar o minimizar esos agentes, resolviendo la inflamación y devolviéndolo al estado de salud.
El microambiente participa directamente en el inicio y la resolución de la respuesta inflamatoria. Las reacciones inflamatorias pueden ocurrir en diversos microambientes, los que comprenden las células específicas del tejido y sus componentes especializados de la MEC. La comunicación entre las células y su microambiente es bidireccional y constituye la base del control homeostático de los tejidos.
La consideración del ambiente o “terreno” en el cual tiene lugar la inflamación ofrece una visión más profunda sobre cómo dirigirse a las causas o condiciones asociadas la inflamación crónica, más allá de los síntomas solamente. Sin embargo, debido a la complejidad biológica de la inflamación crónica, la misma intervención podría producir efectos diferentes en diferentes pacientes en momentos diferentes. Los sistemas terapéuticos del futuro se beneficiaran de la capacidad de evaluar el perfil de un paciente inflamatorio, lo que ayudará a identificar y localizar los bloqueos en la resolución y las patologías de base. El estudio de la historia médica del paciente y los tiempos en que culminan los factores de resolución individuales permitirán al clínico evaluar y tratar mejor el estado inflamatorio de un paciente.